“Somos parte de una masa de trabajadores y trabajadoras que estamos al margen de las ayuda para atravesar la crisis”, señaló el titular de la Conarcoop, Ramiro Martínez.
El sector de las cooperativas de trabajo nuclea hoy cerca de 130 mil trabajadores y trabajadoras que están, en la mayoría de los casos, con poca o nula actividad.
Las cooperativas que se dedican a la gastronomía, apenas llegan al 20 % de su facturación con el servicio de delivery. Las industriales, de servicios y construcción están sin actividad, ya que no están exceptuadas de la cuarentena y las dedicadas al cuidado domiciliario están trabajando un 50%. El sector de reciclado tiene actividad, dependiendo de cómo se esté manejando el aislamiento en cada localidad. “Estamos parados, seriamente afectados y no tenemos respuesta”, enfatizó el presidente de la Confederación Argentina de Trabajadores Cooperativos Asociados, Ramiro Martínez.
Como sector del trabajo, “acompañamos esta gestión y las políticas públicas que se están implementando e incluso le pusimos el hombro. En algunos casos, algunas textiles que hacían ropa de trabajo se reconvirtieron y empezaron a hacer barbijos, pero ese impacto es ínfimo».
«Creemos que esperamos el tiempo prudencial para reclamar porque en este momento somos parte de esa masa que está quedando excluida”, dijo Martínez al ser consultado por COLSECOR noticas sobre el reclamo que vienen sosteniendo hace unos días.
Esta situación de preocupación ya fue elevada al despacho del ministro de Trabajo, Claudio Moroni, y uno de los disparadores del reclamo fue la no inclusión de las cooperativas de trabajo dentro del Programa de Emergencia de Asistencia al Trabajo (Repro), a pesar de que en su mayoría están cerradas y viviendo un momento extremadamente crítico.
“Como nuestro formato jurídico es el acto cooperativo de trabajador autogestionado, no tenemos relación de dependencia, quedamos fuera de la asistencia”, señaló Ramiro Martínez.
El Repro asiste a pymes y grandes empresas en el pago de parte o la totalidad de los salarios, en el caso de verse afectadas por la crisis del coronavirus. Sin embargo, las cooperativas, que en su gran mayoría han debido cerrar sus puertas en las últimas semanas por el aislamiento preventivo, no son beneficiarias al no tener contratos de trabajo dada su conformación jurídica.
“Tampoco nuestros trabajadores han sido contemplados en la IFE porque si venías realizando alguna actividad, el análisis de patrimonio que hacen deja afuera a los trabajadores, más allá que pudieran o no tener la categoría”, explicó el dirigente de la confederación que agrupa a 12.500 trabajadores autogestionados de 16 provincias.
Desde Conarcoop explicaron que tampoco las asistencias financieras a través del sistema bancario, lanzadas por el Estado desde el comienzo de la crisis por el coronavirus, contemplan al cooperativismo de trabajo.
Por último, pidieron revisar los montos asignados a la Línea 1, un programa por el cual se le otorga a cada asociado de las cooperativas afectadas por la crisis un monto de retiro mensual suplementario. “Ese monto, que es fijo por asociado, quedó hoy muy desactualizado (es de $ 4.400) y es muy inferior al respaldo que el Estado brinda a través de Repro a las empresas afectadas”, indicó Martínez.
Si bien por dos meses la Línea 1 otorgará $6.500, “esto es incompatible con las asignaciones familiares, como la AUH, que automáticamente se caen. Quedamos por debajo de toda ayuda social”.
“Quizá nos somos hoy población tan vulnerable y masiva, pero la verdad somos en muchas localidades actores importantísimos que generamos desarrollo local. Nos sentimos ciudadanos de última, no entramos dentro del sistema productivo. Creemos que esperamos el tiempo prudencial para reclamar”.
fuente: www.colsecornoticias.com.ar